A punto de empezar el Cónclave todo el mundo tiene la mirada puesta en Roma. Sin duda esto se debe al prestigio del Papa Francisco, que poco a poco ha recuperado para la Iglesia un nivel alto de relevancia social. Su funeral ha sido, sin duda un hito. Y, además la misión evangelizadora de la Iglesia puede ganar muchos enteros si el nuevo Papa sabe aprovechar la ola de popularidad de Francisco.
Hay un montón de reformas que se presentan como inaplazables, entre ellas que la mitad de la Humanidad no tiene todavía el lugar que le corresponde, empezando por el Cónclave. ¿Dónde están todavía las mujeres en la Iglesia? Francisco ha dado pasos, pero hay que seguir con fuerza y valentía…
Devolverle a la persona humana su dignidad será una tarea ineludible e importante. No es posible que el Hijo de Dios se hiciera hombre, y el hombre, hoy, se haya convertido en nada. Para ejemplo, Gaza, Ucrania y el resto de los cincuenta y tantos conflictos que están vivos en el mundo.
Y desde el nuevo Papa hasta el último cristiano tenemos que empeñarnos en la tarea de anunciar la validez del mensaje cristiano y su pertinencia para dar respuesta a los grandes interrogantes de las personas. Evidentemente, con temor y temblor, confiemos en que el Espíritu Santo aletee en La Sixtina, a pesar de los inhibidores…Francisco es un faro desde Santa Maria la Mayor.
Recordaba Benavent, en rueda de prensa después del fallecimiento del Papa: “Hace apenas unos meses, el Papa recibió en audiencia a los seminaristas de la diócesis. El Santo Padre dirigió un mensaje en el que decía que el sacerdote tiene que saber embarrarse con el sufrimiento de las personas, en una clara alusión a lo que aquí habíamos vivido”. Y vaya que se embarraron todos los curas de las parroquias…
Por eso, como se suele decir, las buenas noticias no son noticia para los medios de comunicación, sin embargo la permanencia de las Cáritas en su tarea con los afectados de la Dana ha sido y sigue siendo importante. Y no es sólo noticia, sino una realidad. Cáritas ha atendido a más de 5900 familias y 15000 personas a través de las 32 Cáritas parroquiales activas en las zonas afectadas.
Según me informan, el Plan de emergencia especifico ha movilizado 9 millones de euros y continúa en marcha. Una cantidad que nos muestra la solidaridad de la Iglesia Valenciana, además de los medios humanos y voluntarios. Gran parte de este monto se ha utilizado para ayudas directas a familias y personas afectadas, mientras que alrededor de 100 mil euros fueron destinados a ayudas para centros educativos y el tejido asociativo.
«Cáritas estaba, está y seguirá estando, allí donde se necesite, para acompañar, apoyar y ser parte de la reconstrucción tanto de las zonas afectadas como de la cotidianeidad de las personas que las habitan», ha añadido Aranda. El corazón de Cáritas no olvida…está latiendo permanentemente en los necesitados, en los márgenes y en las periferias.
El miércoles por la tarde empieza el Cónclave en la Capilla Sixtina. esperemos que los Cardenales miren a sus corazones y hacia el techo para acordarse del Juicio Final, antes de emitir sus votos.
Está claro que estos días previos, además de las famosas Congregaciones están las comidas, las cenas y los conciliábulos
No mistifiquemos tanto los encuentros entre los Cardenales, que son personas de carne y hueso y con intereses diversos
De todos modos, el Espíritu Santo sabe mucho de algoritmos e inteligencias artificiales. Estoy convencido que nos dará una respuesta estupenda, a pesar de los pesares y de las necesarias mediaciones humanas. Y no olvidemos que las casa de apuestas no son votos, sino apuestas, y que no son inocentes, sino intencionadas y bien engrasadas por grupos de presión muy poderosos política y económicamente.
Los Cónclaves son siempre inciertos, pero como me dijo un buen amigo de la Curia Vaticana, ya fallecido, unos meses antes de la muerte de Juan Pablo II, ante mi pregunta sobre los candidatos, me respondió: “Los Cardenales optarán por alguien que les inspire seguridad: Ratzinger”. Y así fue. ¿Quién puede darles esta sensación a los actuales cardenales? ¿No estamos ante un Colegio Cardenalicio variopinto y abierto muy distinto del que eligió a Ratzinger, en su momento, y a Bergoglio? ¿Tendrán los mismos miedos'?
Un Conclave en el que, en principio no emerge ninguna figura clara, se me ocurren algunas preguntas: ¿Cómo se llegará a esos dos tercios necesarios para una elección clara? ¿Se diluirán los bloques y se asociarán suficientemente?
La muerte del Papa Francisco, sin duda era una noticia esperada por su edad, pero también por su historial médico. Nos deja a todos muy abatidos, y que sólo este tiempo de Pascua nos lleva a asumir en estos momentos esta noticia con esperanza.
Y, al final, ha muerto con las botas puestas. Con un hilo de voz, muy mermada, nos felicitaba la Pascua. La impresión es que hasta el último aliento ha estado al servicio de la Iglesia, particularmente de los más pobres.
Mientras muchos nos encontramos en el merecido descanso de las fiestas pascuales, en Gaza, se sigue malviviendo y malmuriendo ante los ojos del mundo. Sin duda, la salvajada del 7 de octubre por parte de Hamas ha sido vengada con creces por el ejército de Israel, al mando del gobierno de Netanyahou.
El pueblo palestino de Gaza y Cisjordania lo tiene muy crudo. Se encuentra, por un lado, rehén de los desalmados y asesinos de Hamas que están errando la estrategia que puede llevar algún día a la paz; y, por otro lado, son la diana diaria de un gobierno sin principios éticos de ningún tipo. Pero no lo olvidemos todo esto está sucediendo ante la mirada indiferente de muchos gobiernos y ciudadanos.
Las dos únicas voces que hablan claro y alto últimamente son la del Papa Francisco, cuyas llamadas telefónicas al padre Romanelli, párroco de Gaza, le hacen sentir, seguramente, la tensión de las terribles noticias y la impotencia preguntándose qué más puede hacer…Y, la otra voz, es la del Secretario General de las Naciones Unidas, que clama desde su posición un cese de las hostilidades y un tratamiento humanitario a la población de Gaza.
Los últimos acontecimientos de Gaza están poniendo de manifiesto la incapacidad de los líderes religiosos de Tierra Santa, solos o en su conjunto, para denunciar de manera clara y sin paliativos el genocidio del gobierno de Netanyahou
Cuando en Semana Santa todo el mundo mira a Jerusalén, también Pierbatista el mundo mira la pasión y muerte del pueblo palestino en Gaza y Cisjordania, y espera por supuesto una palabra de esperanza, pero también de claridad en torno a lo que esta sucediendo
Evidentemente, los líderes religiosos de Tierra Santa, sea musulmanes o cristianos, tienen mucho miedo de pronunciarse en torno al conflicto. Con la boca pequeña, y tomándose un te, dicen que hacen cosas y que intentar mediar, pero su eficacia es nula, ya que probablemente están muy controlados por los servicio de información.
Evidentemente no compartimos la barbaridad de Hamas de tomar como rehenes a la gente palestina, pero la violencia y la desproporción del gobierno de Netanyahou alguien tiene que denunciarlo y pararla. Y, por supuesto los rehenes israelíes deberían estar ya en sus casas, disfrutando de sus familias.
No deseo otra cosa que el Papa Francisco se recupere y retome, con probablemente una menor actividad, su agenda cotidiana. Y rezo para ello, aunque otros, con alzacuellos incluidos, han puesto botellas de cava, prosecco o de champagne a enfriar, según la latitud geográfica.
Sin duda, el Papa Francisco, ha provocado que la Iglesia católica haya avanzado a pasos de gigante en muchos dominios, en otros no se ha movido ni un milímetro, pero probablemente ha puesto las bases para que el posible sucesor pueda seguir profundizando y tomando decisiones más concretas.
La Iglesia católica no puede seguir perdiendo trenes y llegando tarde a muchas cuestiones que se plantean en nuestros tiempos de manera ya muy urgente. El celibato opcional está a la espera de un estudio lúcido y serio de su viabilidad y aplicación.
Algunas cuestiones internas también tendría que plantearse seriamente: Una elección del Papa más universal y de los obispos menos secretista; una participación de los laicos más cualitativa en la vida eclesial en general, un mayor compromiso con los jóvenes, es decir con el presente y el futuro…
A la espera de su pronta recuperación o de su paso al Padre nos avanzamos a la especulación. Me contaba un cardenal que, unos días antes de empezar el Cónclave que eligió a Bergoglio, le invitó a comer a su casa y que estuvieron de acuerdo en departir sobre los criterios de elección, pero no de nombres. Me gustaría plantear las dos cosas, primero los criterios, y después los nombres.
Me permito añadir al dominico Vesco, al que conocí en Jerusalén en L´Ecole Biblique, y que desarrolla su ministerio episcopal en Argelia. Un hombre bien preparado y con una cabeza bien clara
Hablaba con tal entusiasmo que resultaba absolutamente convincente, ya que denotaba que estaba convencido de todo lo que hacía y proponía. Comentaba hasta los mínimos detalles de cada proyecto, se notaba que los llevaba en la cabeza, porque antes los había pasado por su corazón
Nicolás defendía con toda libertad sus propuestas, porque tenía bien claro que era la causa de los más pobres lo que estaba en juego, y a los que quería devolverles la dignidad
Nicolás era un gran conversador. Compartir la mesa con el era pasar no sólo un momento muy agradable, sino aprender de la Historia de la Iglesia Española, en la que había tenido distintas responsabilidades y de la actualidad de Bolivia, en don se encontraba muy incardinado a todos los niveles.
Su obra, sin duda, continuará, ya que sus raíces son auténticamente evangélicas. El día del Juicio Final, como nos recuerda el evangelio de Mateo 25, muchos se levantarán para dar testimonio de la obra realizada por Nicolás Castellanos
Alguna vez hemos oído decir que en las elecciones de Estados Unidos debería de votar todo el mundo, ya que las consecuencias de las decisiones de su presidente, para bien o para mal, nos afectan a todos los habitantes del planeta
Una de las primeras firmas, a bombo y platillo y con acusaciones incluidas, del presidente Trump ha sido la supresión del organismo USAID. La organización más importante de cooperación internacional. Esto de entrada significará la muerte de millones de personas que dejarán de percibir las ayudas necesarias para sobrevivir.
Por otro lado, miles de inmigrantes, a los que les costó mucho dinero entrar en los Estados Unidos, y que sobrevivían con trabajos que los americanos no quieren hacer, también han visto sus vidas truncadas, sea viviendo con el miedo de ser expulsados o detenidos para ser enviados de vuelta a sus países o a Guantanamo.
Espermos que las Iglesias, como la famosa obispa, reaccionen ante estas políticas, ya que sino serán cómplices de esta barbarie humana
La Humanidad con este hombre ha retrocedido a la época feudal, en la que el Señor era el dueño de vidas y haciendas. ¿Cómo se puede decidir sobre la vida de dos millones de personas de una manera tan burda y grotesca? Se tienen que marchar los palestinos, a las buenas o a las malas, y dejar libre ese espacio para que el Señor Trump construya una especie de Las Vegas
A pocas horas de cumplirse los tres meses de la Dana quiero presentar algunos testimonios, recogidos por la revista “El Llidoner” de la parroquia Nuestra Señora del Don de Alfafar, que pueden expresar lo vivido por muchas personas en todos los pueblos afectados. La voz de algunos, sin duda puede ser la voz de todos.
Como cristianos no podemos permitirnos caer en la tristeza o la desesperación, aún en el dolor ni por la pérdida de algún ser querido, ni por las casas, coches o desempleo. Yo aún con el duelo por mis padres. Y, por eso, la palabra que más he repetido estas últimas semanas es esperanza.
El agua seguía subiendo. Casi llegaba a la primera planta. Estábamos ya agotados y, ciertamente, ya no se podía hacer nada más. Estaba todo en manos de Dios. Fue entonces cuando decidimos rezar un Rosario en familia, pidiéndole a nuestra Madre que cesara de subir el agua. Al terminar, comprobamos que el agua se había detenido.
“Del barro también nacen las flores”. Bonita frase… la dijo una alumna del colegio llamada Esperanza (nombre muy apropiado para este tiempo, por cierto). Habíamos vuelto al colegio tras el desastre de la DANA y cada alumno expresaba sus sentimientos después de todo lo sucedido. Esta alumna tuvo la capacidad (y la sensibilidad) de “darle la vuelta” a la situación.
"¿En qué pueden ellos cualificar la vida diocesana? Sin duda el arzobispo les encargará de manera concreta las tareas que considere oportunas con el fin de desempeñar su ministerio episcopal. Pero me permito detectar unos ejes que es necesario desarrollar y que por su talante podrían ser muy positivos para la Iglesia diocesana"
"Arturo Javier García: Mantener la llama viva de la misión, apoyando proyectos serios de evangelización y promoción humana, y de eso tiene amplia experiencia. Pero también cuidando a los sacerdotes, en situaciones delicadas que cada vez más abundan en una Diócesis tan compleja"
"Fernando Ramón, por su talante entusiasta y cercano, así lo recuerdo. Tendría que implicarse en esta tarea a fondo: recuperar a la gente joven al precio que sea. Por otro lado, puede dar un impulso también a la formación bíblico-teológica de los laicos"
María de Nazareth soñó, como todas las madres, en un parto en las mejores condiciones, pero se encontró con un recibimiento frío, insolidario y desconcertante. Ella, que conocía al detalle todo lo acontecido en la gestación de ese niño seguro que se sorprendería de la escalada tan negativa que le llevó a dar a luz a su hijo en el lugar donde comen los animales. ¿Qué pensaría? El evangelio nos dice que “guardaba todas estas cosas en su corazón”. Lo que está claro es que las cosas empezaron muy difíciles para María, José y el niño…
Y María el evangelio repite que María “guardaba estas cosas en su corazón”. ¿Que pasaría por la cabeza y el corazón de aquella joven palestina? Probablemente muchas dudas, mezcladas con la alegría de ser la madre de esa criatura sorprendente. No sabemos muy bien como sucedieron los hechos, pero los evangelios desde su perspectiva catequética y teológica, no esconden que la llegada del Hijo de Dios no fue acompañada de gaitas y panderetas, es más, incide en la humilde acogida al niño.
Por eso la Navidad esconde en el fondo un sabor agridulce, que la sociedad consumista quiere camuflar con los centollos, las cigalas, el turrón y el cava. Todo esto me parece muy bien, mientras no perdamos de vista lo esencial.
El mundo que nos ha tocado vivir es el que es, y no el que quisiéramos, pero sigue siendo un reto para todos nosotros. Cada uno dentro de sus límites y posibilidades, puede hacer posible que crezca la esperanza para muchas personas. La legión de voluntarios que acudió a embarrarse en Los pueblos del la “Horta sud” de Valencia, como consecuencia de la Riada es un ejemplo de Humanidad con mayúsculas. En el fondo, y a pesar de todo, el hombre en algún momento siente la llamada del hermano necesitado.
Hacer Navidad es recordar que aunque todo empezó muy mal, que acabó peor, ni más ni menos que en una Cruz, pero que la muerte no tuvo la última palabra, ya que la Resurrección y la Vida eterna nos marcan el destino final…Nuestro Dios es un Dios de la Historia, pero también de la metahistoria.
Este jueves, 19 de diciembre, en la Santa Iglesia catedral, el arzobispo Benavent, ha convocado a todos las voluntarias y voluntarios, que de buena voluntad, se arremangaron los pantalones, y sin miramientos, se pusieron al tajo para empezar a limpiar las calles, a llevar comida…
Las mochilas llenas de arroz, de pastas…en una palabra, a asistir a aquellos que lo necesitaban. Parecía mentira, a apenas unos pocos kilómetros de Valencia…Primero con zapatillas, después vinieron las botas de agua y las necesarias protecciones por razones de salubridad…
En Valencia, la catedral repleta, fundamentalmente de jóvenes, en una celebración a caballo, entre la solemnidad catedralicia y el aire juvenil del coro del Movimiento Junior los seminaristas de Moncada, Benavent, ha recordado que este acercamiento a la Navidad es confesar que somos cristianos, porque hemos conocido la bondad y el amor de Dios”, y por lo tanto, en clave para los voluntarios: “nuestra vocación, la de cada uno en nuestras circunstancias, es ser sembradores de ese amor que hemos conocido, en el que hemos creado, y por eso estamos llamados a sembrar esperanza en el corazón de los hombres”.
Presentación del libro El mundo de la juventud. Desafíos y retos de la digitalización del mundo para las próximas generaciones” de José Miguel Martínez Castelló
¿Cómo es posible que esa Generación de cristal se ha mostrado en un acontecimiento que ha producido la fractura de familias y de vidas enteras? Creo que es importante recordar hoy el impulso de la Iglesia en relación con la juventud a través de las diferentes JMJ. ¿Qué institución en el mundo acoge a la juventud como un elemento esencial? ¿Es imaginable una Iglesia sin el impulso y la sabia de los grupos juveniles?
¿Qué hemos hecho o qué no hemos hecho? ¿Por qué a nosotros y de esa manera tan inesperada? No sabemos ni el día, ni la hora…Eso me decía un amigo, afectado de manera total, pero añadía: “pero puedo contarlo y vivir este desastre”, y lamentando con lágrimas la pérdida de vidas humanas.
A nivel colectivo sin duda, el espectáculo ridículo, tacticista y deleznable de la clase política, enzarzada en luchas diarias para destrozarse entre ellos, es absolutamente despreciable, cuando todavía andan buscando a personas desaparecidas y cuando todavía hay grandes problemas de todo tipo en los pueblos afectados
Sin embargo frente a esta nefasta historia de los políticos, la Iglesia de Dios en Valencia, ha estado, está y estará al pie del cañón. Desde el primer momento los párrocos de las localidades afectadas, muchos de ellos con iglesias y viviendas inundadas, se han arremangado la sotana y se han puesto codo con codo con su gente.
El Arzobispo de Valencia, que me consta ha estado en su sitio de pastor en esta situación, sin duda alguna, liderará por medio de Caritas Diocesana y parroquiales las ayudas para los más necesitados. Y, por supuesto, recordará a las Instituciones Políticas sus deberes para con todos los ciudadanos.
Pero el hombre, también desde hace siglos, está en guerra con la naturaleza. Ha roto también la armonía creacional. Y la naturaleza cíclicamente se toma su parte, re rebela, nos sorprende y nos avasalla. Esta guerra existe, y la podemos llamar como queramos, pero el hecho es que, de vez en cuando nos ataca con mucha dureza, una veces con fuego, otras con agua, con terremotos.
César García, Párroco de Nuestra Señora del Rosario de Sedaví. me decía “esto no nos lo podemos creer, pero es una realidad. Nos ha dado de lleno y en totalidad. Vidas humanas, bienes materiales. El Apocalipsis”,
Carlos Pons, me contaba que el panorama que se ha encontrado nunca se lo podía imaginar: “Es mucho más que lo que vemos en la fotos o en las imágenes”. Nos dice: “Necesitamos que despejen cuanto antes las calles, y se puede transitar con seguridad, la parte baja del pueblo ha sido la más afectada…”
Me decía Ángel, Párroco de Nuestra Señora de Lepanto de Castellar : “hemos de lamentar dos víctimas mortales, pero que la gente tuvo un poco más de tiempo par reaccionar y subirse a los primeros y segundos pisos”, Me dice que “sin embargo echa de menos un aviso más pronto cuando ya veían que el agua bajaba en tromba desde los barrancos de arriba”. “Hemos de asumir la realidad y vivir con ella para recuperar la esperanza”.
Benavent, en una breve alocución, ha expresado su cercanía y solidaridad con las víctimas y con todas las personas afectadas, recordaba ”Muchas de ellos no han podido llegar a sus casas y han pasado la noche a la intemperie, viendo como sus vehículos eran arrastrados por el agua”
“Los más afectados, son los que están más cerca del corazón de una madre. Ellos son, ahora los Desamparados”.
La revista nació con el nombre valenciano de “Cresol”, que significa “candil”, seguramente en referencia en a Mat. 5, 15-16. Sin duda, su vocación durante estos 26 años ha sido, justamente iluminar a los de la casa, y desde ahí, irradiar hacia el exterior. Para ello se ha rodeado de grandes firmas en todos los ámbitos, pero particularmente en todas las ramas de la teología.
Cresol está sabiendo caminar al paso de la primavera de Francisco, fomentar una sana y atrevida reflexión teológica, abrir caminos nuevos en la pastoral y enraizarse en la cultura y en la lengua valenciana.
Conocí a Vicente Juan Segura en la última parte de los setenta e inicio de los ochenta, compartiendo con él un duro trabajo social.
El Colegio de San Javier en aquel entonces pertenecía al Ministerio de Justicia, dependiendo de la Audiencia Provincial. Allí recalaban los menores, cuyos padres tenían problemas carcelarios o penales de todo tipo.
Vicente Juan Segura, como Juan Oliver y un servidor, junto con las hermanas y un grupo de voluntarios intentábamos hacerles a esos chavales la vida lo más agradable posible. Durante tres largos veranos estuvimos juntos