“Jesusito de mi vida, Jesusito de mi corazón..” (A Sanz Montes, Arzobispo de Oviedo)

“Jesusito de mi vida, Jesusito de mi corazón..”. Esta es la oración que nos enseñaban las madres y las abuelas antes de ir a dormir, junto con la de las “cuatro esquinas” y al angel de la guarda. Supongo que no te acordarás ya que te queda un poco lejos. La buena inocencia parece que ha desaparecido de tu vida…

Me lo he pensado varias veces si escribir algo sobre tu última aventura tuitera. Me he dicho que no vale la pena. Probablemente hacerte caso significa mantenerte en el candelero y así alimentar a tus huestes y, lógicamente, a tu vanidad.

No hace mucho tiempo te dije, de manera clara, que no eres un hombre de “Paz y Bien”. Y esto es lo peor para alguien que debajo de sus capisayos lleva el hábito de San Francisco. Ahora te digo que si sigues manteniendo tus afirmaciones pongo en duda que seas un hombre evangélico.

Me quedo con el término “morito”, que de forma despectiva y sarcástica has pronunciado, con el pectoral en el pecho. Me gustaría que los muchos o pocos “moritos” cristianos que hay en tu Archidiócesis se plantasen delante de tu casa para protestar por tus excesos intencionados. ¿A quién pretendes provocar con esas declaraciones? ¿Qué buscas, qué intenciones escondes?

No cabe duda que en muchos países musulmanes los cristianos, en pleno siglo XXI, ven sus derechos limitados, e incluso son perseguidos o asesinados, pero por regímenes políticos dictatoriales o terroristas. La lucha por los derechos humanos, hoy mas que nunca, es necesaria, pero con gente como tu mejor ni empezar

No cabe duda que en muchos países musulmanes los cristianos, en pleno siglo XXI, ven sus derechos limitados, e incluso son perseguidos o asesinados, pero por regímenes políticos dictatoriales o terroristas. La lucha por los derechos humanos, hoy mas que nunca, es necesaria, pero con gente como tu mejor ni empezar. Desde luego con la expresión “moritos”, demuestras poca empatía y menos capacidad de diálogo. ¿Acaso comparas aquellos “moritos” del machete y el kalasnikov con la gente que, a riesgo de sus vidas, busca un mundo mejor para el y su familia? ¿Dónde esa reciprocidad que invocas en países dictatoriales? ¿No te has enterado que este todavía es un país democrático y tolerante, respetuoso de todos los derechos de los seres humanos? La reciprocidad en todo caso es simétrica.

Y, eclesialmente, destrozas el trabajo que el Papa Francisco, y, sin duda el Papa León, han hecho para trabajar por un diálogo constructivo con el Islam. Sin olvidar que no eres un “verso” suelto de la Conferencia Episcopal Española. Eso te gustaría. Pero dejas en evidencia a tus hermanos obispos que callan, ya que no quieren mostrar las discrepancias. y, como me decía alguien son cosas de “Sanz Montes”. Y con eso se conforman. Por eso te he escrito, porque no me conformo. Eres el “Pastor” de una Archidiócesis muy significativa, que ha acogido durante decenios a personas que buscaban en las minas su salida familiar y profesional. No eran “moritos”, pero terminaban con el cuerpo tintado por el carbón y con las “siliconas” carcomiéndoles. No criminalices a todo un colectivo…Son los leprosos de hoy que besó San Francisco.

Dejas en evidencia a tus hermanos obispos que callan, ya que no quieren mostrar las discrepancias. y, como me decía alguien son cosas de “Sanz Montes”. Y con eso se conforman. Por eso te he escrito, porque no me conformo

Te mereces un buen toque de atención desde Roma, ya que la CEE no puede hacer nada, como el obispo de Toulouse, que ha nombrado Gran Canciller a un pederasta; al menos la Conferencia Episcopal Francesa le ha invitado a reconsiderar el nombramiento. Triste Asturias.

Acuérdate cuando te comas una manzana o te bebas un vaso de vino, que han llegado a tu mesa, gracias a manos de “moritos”.