Hazte socio/a

❤️ ( l-ll) Que poco necesito y lo poco que necesito, lo necesito poco. ¡El Amor no es amado! S. Francisco de Asís (Francisco lo gritó… y sigue doliendo)

Qué larga es la condena de una vida sin amor. Qué dura la pena del que pasó por el mundo sin dejar huellas ni abrazos-

Pero qué corta —

¡y qué hermosa!— es la vida cuando se vive amando,

como la rosa que se abre sin ruido, como el ruiseñor que canta sin testigos.

❤️ ( l-ll) Que poco necesito y lo poco que necesito, lo necesito poco. ¡El Amor no es amado! S. Francisco de Asís (Francisco lo gritó… y sigue doliendo) | Alfonso Olaz

¡Que poco necesito para ser Feliz, Señor!

Saberme que estoy en tus manos

Que me haces TÚ pobre, para consolar a mis hermanos pobres

Que con nuestro egoismo asi los hemos hecho.

Cuan pobre barro soy

y con tu soplo de fuego

me das la vida, para ser tu criatura que abrase-

y anuncie con su ejemplo, la esperanza para todos, todos.

Desde tu infinito me has cuidado

y ahora con tu espiritu me has traído a tu tierra buena,

para hacer tu voluntad.

Y proclamar la buena nueva a mis hermanos pobres de tu tierra mojada.

Carezco de todo, que todo es tuyo, y nada merezco, porque soy muy poca cosa.

¡De que me preocupo Señor, Si nada me falta y todo contigo lo tengo!

Dejarse llevar en el soplo de tu espíritu es sencillo y difícil.

Y encajar todo en mi vida, para hacerla Tuya

Sencillo como las avecillas,

Humilde como el gusano

Fuerte como el hermano Sol

Luminoso como las hermanas estrellas.

Siendo tu río para saciar al que tiene sed

Esencia de tu mar para despejar todas las dudas del incredulo

Naturaleza de tu montaña para mostrarte a todos, que tu eres presencia viva

🧡

(ll) ¡El Amor no es amado!

(Francisco lo gritó… y sigue doliendo)

¡Hermano, no tengas miedo de amar!

¡Ten miedo, sí… de no hacerlo!

De dejar pasar la vida como un tren vacío, sin ternura, sin rostro, sin compromiso.

Qué larga es la condena de una vida sin amor.

Qué dura la pena del que pasó por el mundo sin dejar huellas ni abrazos-

Pero qué corta —

¡y qué hermosa!— es la vida cuando se vive amando,

como la rosa que se abre sin ruido, como el ruiseñor que canta sin testigos.

¡Hermano, todavía estás a tiempo!

Aunque no hayas amado, aunque no hayas sabido, aunque no hayas podido.

Cree. Y ama.

Porque ya no amas solo. Ahora Él ama contigo.

Y tú con Él.

No tengas miedo.

El miedo no viene del Amor.

El miedo encierra.

El Amor, no.

El Amor libera.

Y el Amado se deja amar, con manos torpes, con corazón herido, con historia quebrada.-

Ahora ama y Confía.

Que amarás como Él sueña. Amando, amando mucho, sin medida, sin defensa.-

Para que el Amor, sea por fin amado. Y ya no olvidado.

Y para que el Amado —Cristo pobre y hermano—

ame también en ti a tu hermano, al caído, al último de todos.-

Porque ahí es donde Él vive. Y donde tú has de vivir.

Como vive el amor entre la rosa y el ruiseñor: silencioso, fiel, gratuito.

Del Evangelio a la vida… De la vida al Evangelio…

También te puede interesar

Necesitas la audacia de la primera vez: De amar y actuar como el Sol, sin calcular el gasto. De callar como el buen leproso, que se sabe vacío, para que Él hable en la voz del oprimido.

❤️ El Grito Mayor se Esconde en el Silencio (La Delgada Línea de la Confianza, ¡Nuestra única Riqueza!)

Rostro palpable de la inquietud del pobre. ¡Jesús, Tú eres!

❤️ Jesús, ¡Tú Eres Uno de los Nuestros!

Vivir con poco para amar mucho, Viviendo mucho con poco teniendo

❤️ La Abundancia del Poco

Lo último

#AdvientoFeminista2025

MARÍA DE NAZARET: AMOR SORORO