El padre Alfredo pasó por la vida como Jesús haciendo el bien a todos y, sobre todo, a los niños, los más vulnerables
En 1980 abre en Santa Cruz de la Sierra la primera aldea, que hoy tiene 11 casas de familia, una residencia para adolescentes y para jóvenes. Más tarde en 1997 crea el centro de madres solteras “Madre María”
Hermano y profeta menor, itinerante por caminos nuevos, samaritano por amor, profeta por vocación en el mundo infantil destacó por su sensibilidad humana, espiritual y social
Hoy hacemos memoria agradecida de nuestro buen franciscano ha sido un regalo que nos ha hecho el Señor a todos. Y especialmente a los niños de sus aldeas infantiles