“Estamos firmemente convencidos de que, así como atesoramos una gran historia que contar y que vivir en el presente, estamos también llamados a construir un futuro como consagrados en la Iglesia para el mundo; un futuro que hay que frecuentar sin temor”
"Continuemos denunciando la injusticia, la falta de hospitalidad, el miedo y desprecio a los inmigrantes y a los pobres, la economía inhumana, la agresión a la obra creadora de Dios..."
"Caminar por Cristo, como bien canta Casaldáliga, es dejarle ser a Él, sin reducirle, sin manipularle. Es unirse a quien es y nos hace cosechadores de riesgos y de dudas, capaces de derribar los poderes de este mundo"
Un servicio “en marcha, bajando a las cunetas a buscar a los apaleados, a quienes ayuda a incorporarse para que ellos puedan aprender a caminar o volver a hacerlo. La vida consagrada en salida es siempre vida consagrada samaritana”
"Nuestra fraternidad de personas consagradas ha de ser subversiva porque hemos sido llamados a poner al Señor por delante de todos los afectos, de modo que Él inspire, sane, clarifique, corrija, renueve y purifique todas las relaciones con espíritu evangélico, con el fuego que ha venido a traer al mundo y que no elude conflictos. Si nuestra fraternidad es subversiva, favorecerá la comunión sin renunciar a las exigencias del seguimiento de Jesús”