"Por un quítame allá este canon del Código de Derecho Canónico", está abocada la Iglesia a afrontar uno de los problemas de mayor gravedad que se le ha planteado en la historia
El canon es el 1024 en el que sin ambages se proclama y define que “solo el varón bautizado recibe válidamente la ordenación sacerdotal"
Tal discriminación, además de absurda, produce el riesgo de que la mitad de la clientela, que es femenina, borre sus nombres del listado, o del libro parroquial de partidas del santo bautismo
En religión, llegar tarde es siempre pecado. Es no llegar. Y esto incluye consecuencias aún más cuando la mujer es su protagonista, como madre, esposa, hermana, monja o religiosa. Es sobre todo, una descortesía
Son ya muchas las mujeres, teólogas o no, los teólogos y parte importante del pueblo de Dios, que lamentan y no “pasan” ya de la discriminación “religiosa” que la mujer por mujer padece en la Iglesia
Los señores curiales, doctores en misoginia, van a tener que hacer horas "extras" firmando actas de anatemas a diestro y a siniestro… Por poner un ejemplo cercano, los lectores/as de RD son –somos- muchos…