“Tú has cometido un abuso sexual conmigo, un abuso de poder, y un abuso en la confianza que tenía en ti", escribió la mujer, quien sufrió abusos durante siete años a manos del sacerdote, sancionado por el cardenal Cobo
“La Iglesia puso en mis manos un instrumento para hacer el bien a los demás, que tal vez por mi inexperiencia no supe usar adecuadamente, al menos en todos los casos. Tampoco creo haberme querido servir de las oraciones como un instrumento de poder, para hacer creer a las personas que tenían el demonio dentro y que sólo yo podía sacárselo, para establecer así un vínculo de dependencia respecto de mí. Al menos nunca fue ésa mi intención”, le respondió el sacerdote
En su carta de respuesta, E.G.G. asegura que “ya no he vuelto a rezar por nadie de esa manera” a partir de 2010, después de que la diócesis de Madrid le retirara la condición de exorcista tras la emisión de un vídeo con cámara oculta para un programa dirigido por Mercedes Milá.Sin embargo, tanto en el caso de Ana como en el de Laura (relatado en este mismo diario), los supuestos exorcismos se prolongaron, al menos, hasta 2014
Durante casi siete años, entre 2007 y 2014, vivió los “exorcismos” por parte del religioso. A sus 44 años, y por primera vez, quiere contar su historia, y denunciar, civil y canónicamente, para “ayudar a otras mujeres” a sacar a la luz lo que ella sufrió
Incluso, junto a unos amigos, ha lanzado la web https://www.padreenriquetestimonios.com/, para “juntarnos y compartir en un espacio seguro sobre lo que hemos vivido”